Dios mío
Tú que eres poderoso, omnipotente y misericordioso
Bendíceme con la dicha de la abundancia
Aleja de mi vida a todo lo que está destruyendo mi suerte
Permíteme convertirme en un imán de riquezas y bendiciones
Dame la capacidad para administrar mi dinero y multiplicarlo
Protégeme con la sangre de tu amado hijo Jesucristo
Y bendíceme con la suerte y la fortuna
Necesito dinero urgente y solo en ti encuentro consuelo
Haz que mi fe se transmute en una bendición financiera
Y en la medida de la fuerza de mi corazón
Otórgame la virtud de la prosperidad
Amén
Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in sæcula sæculorum. Amen.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in sæcula sæculorum. Amen.
Memorare
Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!,
que jamás se ha oído decir
que ninguno de los que han acudido a vuestra protección,
implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro,
haya sido desamparado.
Animado por esta confianza, a Vos también acudo,
¡oh Madre, Virgen de las vírgenes!,
y gimiendo bajo el peso de mis pecados
me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana.
¡Oh Madre de Dios!,
no desechéis mis súplicas,
antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente.
Amén.