El Tao Te King (libro escrito durante la dinastía Zhou, 300 años antes de cristo por Lao Tse) es una de las obras que más a influenciado a la cultura china. Tao es camino, senda, todas las personas parten y vuelven al Tao.
La meditación taoista nos permitirá reconectarnos a diario con el Tao, potenciando nuestra energía vital y haciéndonos recordar cual es el verdadero sentido de todo esto.
Deng Ming Dao nos describe en su obra 365 Meditaciones Diarias diversas maneras para poder fusionarnos durante unos instantes todos los días con la primigenia fuente de energía que es el Tao.
Realizar esta práctica asiduamente nos ayudara a mejorar el flujo del “Chi” por nuestro cuerpo. Nuestra salud metal, física y espiritual están relacionadas al flujo de esta sustancia etérea según la medicina oriental.
Pasare a describir técnicas de meditación taoista que podremos comenzara a practicar en nuestros hogares por nuestra sin necesidad de prescindir de un maestro, luego de que nos familiaricemos con este método podremos recurrir a un centro taoista de nuestra ciudad para participar en las meditaciones guiadas que suelen ofrecerse.
Meditación taoista basada en el Chi Kung:
- Siéntese cómodo, de ser posible en posición de loto, pero recuerde que lo más importante es que se encuentre cómodo.
- Realizaremos secuencias de respiración en las cuales pondremos toda nuestra atención en el ingreso y el egreso de aire de nuestros pulmones.
- Una vez que hayamos aquietado un poco nuestra mente comenzaremos a visualizar como el Chi se eleva desde nuestra cintura a nuestra cabeza realizando un espiral que se mueve en dirección derecha-izquierda, 36 veces ira en esta dirección el espiral y 36 veces en la dirección opuesta (izquierda-derecha).
- Luego de que hayamos concluido con las repeticiones pasaremos a visualizar como sube la energía por nuestra columna vertebral (desde el coxis hasta un espacio que tenemos entre la nariz y la boca) cada vez que inhalamos, al exhalar imaginaremos que la energía baja por la nariz por el frente de nuestro cuerpo. Repetiremos esto 36 veces en una dirección y 36 veces en la opuesta.
- Finalizadas estas series nos centraremos en el espacio de nuestro corazón sintiendo como nuestro campo energético se expande mas haya de los confines de nuestro cuerpo.